En la teología cristiana, el bautismo de sangre (en latín: baptismus sanguinis[1][2]) o bautismo por la sangre, también llamado bautismo martirizado,[3] es una doctrina que sostiene que un cristiano es capaz de alcanzar la gracia de justificación que normalmente se alcanza a través del bautismo de agua, a través del martirio sin necesidad de recibir el bautismo de agua.
© MMXXIII Rich X Search. We shall prevail. All rights reserved. Rich X Search